Si estás haciendo un camino de autoconocimiento o de desarrollo personal, seguro que te estarás preguntando ¿de dónde viene el malestar, decaimiento y angustia que estos días experimento?.
Para los que aún están dormidos la reacción automática a esta pregunta es: «pero ¿de qué habla ésta?«, y además:
- es que ¿no es suficiente causa el estar confinados sin saber el tiempo que nos queda de estar recluidos ?, sin poder salir a dar un paseo y disfrutar de la compañía de seres queridos y amigos?,
- te parece poco que las vacaciones de Semana Santa las pase en un apartamento, piso, casa sin poder pisar la playa, la montaña, ver los pasos de Semana Santa, sacar como costalero/a a la imagen de mi cofradía?,
- te parece poco que mis hijos estén desesperados por no poder jugar en el parque, ver a los abuelos, a sus primos, a sus compañeros del cole?, que mi hijo que este año se examina de Selectividad no sepa qué va a pasar?…
Y lo entiendo. Pero estoy convencida de que YA TOCA OTRA COSA. Y toca dejar de actuar con automatismos, desde el piloto automático.
En el post anterior ya he hablado de las programaciones que adquirimos como una forma de supervivencia o mecanismo de defensa ante la herida de nacimiento. También hemos visto que la meditación es la herramienta para empezar el proceso de autoconocimiento, dejar de estar entre el pasado y el futuro y anclarnos en el presente.
Hoy, te propongo tener en claro qué mecanismos del psiquismo actúan en tí cuando se producen cambios y que aparecen como resistencia a la aceptación y al estado de fluir con la vida.
Contarte que, a nuestro psiquismo no le gustan los cambios. Ademas, al ego le encanta moverse en terreno conocido, en las programaciones automáticas que generan pensamientos automáticos y emociones automáticas.. Los cambios los lleva mal.
Según Khrisnamurti, «Formamos parte de una sociedad tan enferma que a los que quieren sanar les llamamos raros y a los sanos locos»
Lo que escribo a continuación son ejemplos de formas de actuar automáticas , quizás puedes reconocerte en alguna de ellas.
♦ Automatismos ♦
- Incertidumbre. No hemos vivido una situación así anteriormente, qué pasará mañana, quizás me contagie o se contagie alguien de mi familia, quizás pierda el empleo.
- Autoengaño. No puedo creer que me esté pasando esto a mí, seguro que cuando pasen estos días todo volverá a la normalidad.
- Narcotización. Bueno ya que estoy recluido/a me voy a dar una recompensa, así que barra libre para comer dulces, chocolates, cervezas, bebidas alcohólicas y pastillas parar dormir o para la ansiedad.
- Resignación. Qué vamos a hacer, algo habremos hecho mal la humanidad para ser merecedores de ésto. Seguro que si los políticos, la OMS, las autoridades sanitarias dicen que es lo que hay que hacer, vamos a aceptarlo. Me siento agotado/a.
- Victimismo. Quién es el responsable de esta situación, seguro que el gobierno podría haber puesto las medidas de restricción antes y no hubiéramos llegado a ésto, los empresarios están aprovechando la situación para ahorrarse costes, qué va a ser de mi familia y de mi.
- Arrogancia y cinismo. No me creo nada, seguro que nos están ocultando datos e información.
- Pereza. Pues ya que no puedo salir me abandono al sofá, dejo de asearme, de mover el cuerpo, me paso el dia delante del televisor viendo series. Mis hijos me molestan, mi mujer más, no quiero hacer nada, me dejo llevar
Para reconocer la emoción que subyace detrás de estos comportamientos y ponerle un nombre, tenemos que entrenarnos en algo que llamamos «gestión de emociones».
es decir,
1.-el arte de reconocer y poner nombre a eso que siento en mi corazón, la humildad de hacerlo, entender que forma parte de mi y que puedo abrazarla.
2.- Entender que yo la he generado con un pensamiento que a su vez viene de una programación.
3.- Y actuar mi libertad emocional cuando decido conscientemente si deseo seguir experimentándo la emoción, o no
4.- y si la respuesta es NO (que no desea seguir experimentando esa emoción), aprendo a trascenderla.
Y Tú, ¿Qué emociones tienes en estos días?, a mi me vienen momentos de tristeza, otros de enfado y algunos de miedo.
Si te interesa este tema y quieres conseguir aprender a «gestionar tus emociones» te recomiendo el Taller Supérate de la Formación Emprende Consciente en la vida y en la actividad profesional.
Gracias por estar ahí y mucho ánimo para estos días en casa¡¡